El sexo es una actividad placentera, sea que lo practiques a solas o en pareja. No obstante, a veces queremos salir de la rutina utilizando aparatos que nos lleven al éxtasis, y qué mejor manera de lograrlo sino con un consolador. Este aparato ha llevado las relaciones sexuales a un nuevo nivel, en especial porque no son muy costosos, y vienen en numerosos tamaños, colores y modelos.
Todos en algún momento hemos escuchado la palabra “Consolador”, pero ¿realmente te atreves a utilizar un consolador en la intimidad? Así que, si deseas comprar este juguete sexual, en este artículo te mostramos qué es un consolador, cómo debes utilizarlo y cuidados para que tu juguete sexual dure por más tiempo.
¿Qué es un consolador?
Refiriéndonos al juguete sexual, los consoladores son aparatos que por lo general tienen forma de pene y son usados para producir placer durante el acto sexual, cuyo uso implica tanto a mujeres como hombres. Pero, ¿por qué se llama así?, ¿Cómo puede ser usado?, ¿Qué cuidados se deben tener?
La palabra “consolador” tiene una connotación masculina. Su significado recae en el alivio de la pena o aflicción de alguien. Pero, ¿Qué pena podría aliviar este juguete sexual si se supone que el acto sexual no involucra el padecimiento de alguna pena?
El término, en palabras concretas, hace referencia a un dispositivo que es capaz de aportar sosiego a la soledad, o la carencia de un amante. Podría parecer algo conformista la idea de verlo desde esta perspectiva, pero precisamente eso es lo que es.
Usos del consolador
Uno de los usos más comunes del consolador es que lo introduzcas en el ano o vagina, y a continuación, presiona los botones para poner en marcha los motores de vibración que incluye, a fin de estimular la zona que esté en contacto con el aparato.
Existen consoladores que no tienen motores que los hagan vibrar y requieren de la intervención de otros para estimular la zona en cuestión. Por ejemplo, los consoladores dobles requieren de que la otra persona lo use con sus manos (o incluso la boca) para que su contraparte pueda experimentar placer.
Los usos de los consoladores varían según el diseño del aparato. Hay tantas clases que es difícil determinar cuáles son los usos que le podrías dar durante el coito. Al momento de adquirir uno, verifica que el consolador esté en perfecto estado, especialmente si compras en una tienda virtual. Estos podrían venir con desperfectos de fábrica que podrían ser perjudiciales para ti o tu pareja.
Cuidados que debes darle a tu consolador
Para que tu consolador tenga mayor vida útil y puedas reducir el riesgo a algún daño por mal uso, o mala higiene, te damos estos consejos:
- Al sacarlo del empaque, revisa que el consolador no venga con ningún desperfecto.
- A continuación, lava bien el consolador. Recuerda que este aparato va a estar dentro de tu cuerpo.
- Lávalo muy bien usando un jabón con pH neutro y agua tibia; esto en caso que sea de uso personal. Si es compartido, procura lavarlo con agua caliente y jabón anti bacterial. Esto puede variar cuando son consoladores (dildos, vibradores, masturbadores) de otros materiales como el cristal, o gel; los primeros pueden hervirse y lavarse con jabón neutro, y los segundos con alcohol y un trapo limpio.
- Quita la batería del aparato (si es necesario), con el propósito de proteger los contactos metálicos.
- Lee el manual de instrucciones para hacer un correcto uso.
- Ten mucha precaución con quien compartes el consolador durante las relaciones sexuales.
- Evita prestar tu consolador a terceras personas.
- Debes secarlo muy bien luego de haberlo lavado, cuidando que no queden restos de agua o pelusa.
La responsabilidad del uso de un consolador no solo recae en su propietario, sino también en las partes involucradas en caso de que este pudiera ser de uso compartido. Así como tienes cuidado de con quien tienes relaciones sexuales, también debes ser igual o más cuidadoso de con quien compartes tus juguetes sexuales.